Comunidad en Valencia solicita mejor supervición a la venta de comida rápida o chatarra

Ana Ramos

Pese de que Luis Vílchez, coordinador regional del Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y Servicios (Indepabis), no descarta la posibilidad de inspeccionar de forma selectiva a comercios de venta de comida rápida, explicó que hasta el momento no han activado una jornada de amplia fiscalización al sector. 

En las calles de Valencia abundan comercios informales de venta de comida que incumplen con las normas de salubridad, sin que reciban algún tipo de sanción por parte de las autoridades. Vílchez argumentó que no se puede cerrar un negocio que esté en la vía publica, pero rescató que sí es posible el desalojo del establecimiento con la participación de los cuerpos de seguridad. Se desconoce la cantidad de negocios con estas características. 

El uso de guantes desechables, gorro para cubrir el cabello, agua corriente y no estancada, son algunas de las medidas que deben cumplir los vendedores informales para poder trabajar. Sin embargo, en la mayoría de estas ventas de comida se incumplen las normas, El coordinador recomendó a los consumidores evitar comprar en locales donde se observen limitadas condiciones higiénicas. 

Ante el posible desconocimiento de los trabajadores informales sobre esas medidas, Vílchez anunció que en los próximos días se reunirá con funcionarios de Insalud para iniciar una campaña informativa, dirigida a consumidores y comerciantes sobre las normas higiénicas. La idea es que la población esté informada sobre lo que deben utilizar los vendedores al momento de preparar la comida. 

El funcionario explicó que Indepabis recibe escasas denuncias de consumidores relacionada con esta área, invitó a los ciudadanos a dirigirse a la sede del organismo público en La Quizanda, o marcar el número 0800-denuncia para introducir su reclamo. 

Embargadas marcas de transnacional McDonalds en El Salvador

Credito: Archivo

San Salvador, 15 ago (PL) Un tribunal de El Salvador ordenó el embargo de 56 marcas de la transnacional de comida rápida estadounidense McDonald´s por incumplimiento de sentencia, confirmaron hoy los demandantes.

El empresario Roberto Bukele explicó en conferencia de prensa que el fallo fue adoptado por el Tribunal IV de lo Comercial y actualmente se encuentra en proceso, que puede concluir con una subasta de esas propiedades intelectuales.

Bukele recordó que McDonald´s fue sentenciada el 5 de diciembre de 2005 a pagar 23,8 millones de dólares a la empresa Servipronto El Salvador S.A. en indemnizaciones por daños y perjuicios.

El conflicto se desató en 1997, cuando McDonald´s rompió unilateralmente sus contratos con Servipronto, propiedad de Bukele, que terminaban en 2016, por lo cual fue demandada por el empresario.

Bukele afirmó que desde antes de su condena, la transnacional apeló a recursos legales y fuera de la ley para bloquear el juicio y luego para incumplir la sentencia.

Denunció que la embajada de Estados Unidos realizó presiones ante las autoridades, los tribunales y otros sectores nacionales para apoyar a McDonald´s.

En su caso, el gobierno de Estados Unidos le retiró la visa que tenía desde hacía 40 años, le embargó una propiedad en el estado de la Florida y con medidas y presiones destruyó una empresa de su propiedad en ese país.

Subrayó que la sentencia tiene que ser cumplida por la transnacional, cuya actitud calificó de perversa, por respeto a las leyes y la soberanía de El Salvador.

No se trata de dinero, sino de dignidad, de demostrar que los salvadoreños no somos ciudadanos de segunda clase, de hacer respetar el estado de derecho, dijo.

Denunció que para eludir la sentencia, la transnacional vendió sus propiedades en El Salvador a la compañía McDonald´s Mesoamérica, propiedad de la familia Cofiño de Guatemala.

Ante esa situación, Servipronto logró el embargo de las marcas y distintivos comerciales de McDonald´s e incluso podría afectar con una medida similar a las regalías que la empresa guatemalteca le paga por sus ingresos en El Salvador.

Bukele expresó que es la primera vez que la transnacional pierde un proceso judicial en el mundo y como consecuencia del incumplimiento de la sentencia, sufre un embargo de sus marcas.