En el occidente de Carabobo los municipios Bejuma, Montalbán y Miranda, son victimas de crímenes ecológicos, ocasionados por personas inconscientes que arrojan cantidades de desechos sólidos a zonas naturales y a los ríos, ocasionando daños a los ecosistemas. Además talan y queman los bosques para aprovechar sus recursos es otro de los crímenes ecológicos que se cometen permanentemente.
Este hecho debe motivar tanto a las autoridades que tienen que ver en la materia como a las municipales a tomas de acciones, pues de continuar la depredación, será poco lo que se le heredará a las generaciones que están por venir. Alejandro Machado, integrante de la Brigada Ecológica Contra Incendios y Resguardo Ambiental, de Montalbán, explicó la grave situación.
Esta organización esta constituida por un grupo de personas dispuestas a luchar por la preservación del medioambiente, pero para ello requieren de la ayuda de las instituciones gubernamentales, señaló Machado.
En sus declaraciones el joven ecologista aseguró que la acción del hombre sobre los sistemas ecológicos del país, en algunos casos ha producido efectos que se traducen en cambios ambientales negativos. Como ejemplo de su denuncia aseguró que en las poblaciones de Aguirre y Angelonal, en el municipio Montalbán, las afectaciones a zonas boscosas son producidas por los mismos propietarios.
Existen pruebas que demuestran que una parte importante de las perdidas de bosques esta relacionada con la tala ilegal, por lo que las autoridades competentes deben organizar una inspección para evaluar la situación, aseguró el denunciante. Estima que los gobiernos regional y municipal, deben tomar en cuenta este tipo de crímenes contra la naturaleza que se están cometiendo. Deben trabajar en función de detener las actuaciones de quienes desean aprovecharse de recursos que son de todos.
Machado recordó que como parte de las actividades organizadas por la brigada, en Semana Santa estuvieron en el cerro El Peñón, recolectaron la basura que dejaron parte de las mil personas que visitaron el lugar. La idea era crear conciencia ecológica. Pero a cuatro meses de la actividad lo volvieron a convertir en un ecosistema bacteriológico, es decir inundado de desperdicios.
En Montalbán, municipio donde habita Machado, dice que la Dirección de Ambiente sólo ejecuta acciones en una de las emisoras de radio, por lo que invitó al encargado a dejar los micrófonos y actuar en la realidad, para evitar daños a los ecosistemas
Esta convencido que cuidar el ambiente es responsabilidad de todos. Como habitantes de esta tierra es nuestro deber preservarla. Debemos tener consciente no contaminar, preservar ambiente, saber que lo que estamos haciendo no esta de la mano con la naturaleza. Podemos cambiar todo eso y mantener un equilibrio. Eso es crear conciencia.
Con información de Jenny Sánchez