En 1960, las ruinas de la Casa Fuerte, ubicadas en Barcelona, estado Anzoátegui son declarados Patrimonio Histórico de la Nación.
Originalmente, la Casa Fuerte de Barcelona, fue un antiguo convento franciscano que se transformó en fortaleza por la iniciativa del General Pedro María Freites y Santiago Mariño, en 1811 para la defensa de la ciudad de los ataques realistas. Luego de varias defensas, la casa fue tomada y destruida en 1817, por los realistas, quedando como recordatorio para la historia como ejemplo de la gesta independentista. Allí se levantaron las estatuas del general Freites y de Eulalia Buroz de Chamberlain.