Un día como hoy: José Francisco Bermúdez vence a los realistas

En 1814, José Francisco Bermúdez, a la cabeza del ejército de Santiago Mariño, vence en Los Pilones, al jefe realista Francisco Rosete, quien marchaba hacia Caracas a través de los Valles del Tuy.

Sin embargo, tras el triunfo de Boves sobre Bolívar en  La segunda batalla de La Puerta el 15 de junio, las fuerzas patriotas se retiraron a Caracas y emprendieron la Emigración a Oriente.

Francisco Rosete se caracterizó por acciones barbáricas contra la población civil en el marco de la Guerra a Muerte decretada por Simón Bolívar en 1813.

Un día como hoy: Batalla de Mata de Miel

José Antonio Páez

En un día como hoy, en 1816, José Antonio Páez derrota a los realistas en la Batalla de Mata de la Miel.

Páez, al mando de una fuerza integrada de 300 hombres, se encontraba protegiendo el poblado de Guasdualito, cuando le llegaron noticias de que el ejército realista, bajo el mando del Coronel Francisco López, se encontraba en Mata de la Miel con una fuerza que pasaban el millar de hombres.

Páez hizo caso omiso de la opinión de sus oficiales y se preparó para lanzar un ataque al ejército realista. Tan ruda fue la embestida que la caballería de López no pudo resistir y fue lanceada con bravura. Por esta acción el gobierno neogranadino, le otorga a Páez el ascenso a Teniente Coronel. 

Un día como hoy: Triunfo de Mariño sobre los realistas

  

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En 1814 el General Santiago Mariño triunfa sobre los ejércitos realistas en Agua Negra, actual Estado Monagas.

Tras el triunfo de los patriotas sobre los ejércitos realistas, al mando del coronel Garazola, el General Mariño nombra como su primer ayudante a Antonio José de Sucre, nombramiento que posteriormente le permitiría al joven cumanés acompañarlo en su viaje a la región central, para conocer al Libertador y ayudarlo en la gesta libertadora.

Un día como hoy: La heroína Luisa Cáceres de Arismendi, maltratada por por sus carceleros realistas

Luisa cáceres, quien había formado parte de la trágica emigración a Oriente, en 1814, después del avance de José Tomás Boves sobre Caracas, se casó en Margarita con el general patriota Juan Bautista Arismendi.

Un estrecho calabozo, que aún se conserva en el viejo castillo de Santa Rosa (Nueva Esparta), servía de prisión a Luisa Cáceres. Los realistas intentaban mediante este brutal procedimiento obligar a Arismendi a rendirse y abandonar la lucha por la independencia de Venezuela.

Juan Bautista Arismendi y su joven esposa no renegaron nunca de su condición de patriotas. A cada intimidación de los realistas para que Luisa implorara a su esposo que se rindiera, ella respondía: "Jamás lograrán de mí que le aconseje faltar a sus deberes".

Cuando la Guerra estaba perdida para los realistas, Luisa Cáceres fue trasladada a las bóvedas de La Guaira (Vargas) y después a Cádiz, en España. Lograda la Independencia, regresó a Venezuela, donde volvió con su esposo.

El matrimonio  Arismendi Cáceres tuvo una numerosa descendencia. Sus restos fueron trasladados al Panteón Nacional en 1876.

Tomado del Diario VEA