Ana Rodríguez Brazón
Abandonados y marginados por la gobernación y la alcaldía se sienten los habitantes de Ruiz Pineda I, al sur de Valencia. Cloacas colapsadas, calles destruidas, maleza sin cortar y deficiencias en el servicio de aseo, son algunas de las necesidades que denuncia la comunidad.
Desde hace más de tres años las aguas residuales recorren las calles Bolívar, Guaicaipuro y Miranda, justo al frente de la escuela Ruiz Pineda. Afectados comentaron que en época escolar, los niños deben pasar por encima de las agua negras para entrar o salir de la institución. Si llueve la situación se complica, los estudiantes tienen que esperar que el agua baje para retornar a sus hogares.
Lugareños relataron que la Compañía Anónima Hidrológica del Centro (Hidrocentro) no realiza las labores adecuadamente. “Las pocas veces que vienen a destapar, a los pocos días se vuelven a rebosar las cloacas, además, dejan los desechos sobre la calle”, comentó Iriany Rodríguez.
Los malos olores invaden las casas, por eso es inevitable que las moscas entren. Rodríguez agregó que los niños de su familia constantemente se enferman con tos y gripe, como consecuencia del contacto con el agua sucia.
“Cuando llueve el agua sobrepasa los tobillos, porque los drenajes también están colapsados. Hace mucho tiempo que no se invierte en esta comunidad”, criticó Winston Azuaje.
“Le digo al alcalde que se acuerde de Ruiz Pineda I que lo tiene totalmente abandonado, en el olvido. Tenemos conocimiento que otras comunidades han recibido apoyo del gobierno local, pero aquí no hemos recibido nada”, puntualizó Azuaje, que también hizo un llamado a Hidrocentro para que colabore y destape las cloacas.
La vialidad también es una necesidad de la comunidad, bateas y zanjas se encuentran con mayor énfasis en la calle Guaicaipuro. Afectados señalaron que desde hace 20 años no se ha vaciado asfalto en la zona. “Se nota que el trabajo realizado en aquel entonces fue de calidad, porque ahora es cuando se están dañando las vías, ojalá vengan de la gobernación o la alcaldía y realice un trabajo similar”, dijo uno de los habitantes.
Denunciantes también hicieron un llamado de atención a sus vecinos, ya que los factores políticos han entorpecido algunas actividades. “Hace unos meses vino Operación Alegría a cortar el monte alrededor de la escuela, oficialistas impidieron que la cuadrilla siguiera trabajando. Nadie hace nada por el barrio y cuando se presenta alguien lo sacan. La comunidad debe contribuir y dejar las diferencias a un lado”, sentenció Orlando Azuaje.
El servicio de aseo es otra deficiencia en la comunidad, pues pasa una vez a la semana y las personas deben llegar hasta la avenida para dejar las bolsas. “Aquí estamos en el olvido, ni siquiera el consejo comunal emprende acciones en pro del sector. Ahora que el camión de la basura no pasa estamos peor”, denunció Orlando Azuaje.
Afectados exigieron soluciones pronto a sus necesidades, consideraron negligente la gestión de los gobiernos de turno, ya que en más de 40 años no han sido tomados en cuenta.
ÚNica escuela en total abandono
Residentes denunciaron las condiciones en que se encuentra la escuela Ruiz Pineda I, lo cual se evidencia en el deterioro de las paredes, escombros dentro de las instalaciones y la maleza que crece alrededor. “Pareciera que no trabajara nadie allí de lo fea que está, la comunidad es la que se encarga de limpiar las afueras del colegio y después deben pagar a un camión para que se lleve la basura”, explicó Orlando Azuaje.
La luz es cara y el agua insuficiente
Aunque la luz no se va en la comunidad, las familias criticaron el alto costo del servicio. “Nos las cobran muy cara, tenemos medidores pero pagamos más de 100 bolívares por la electricidad, a veces hasta Bs. 200. Además, hay algunas calles que no poseen alumbrado, contribuyendo a la inseguridad.” comentó José Aguilar. Vecinos relataron que el suministro de agua sólo es hasta el mediodía y no logra abastecer la demanda.