Los conflictos podrán resolverse sin ir a tribunales. (Foto El Carabobeño)
Alejandro Villalobos
No todos los conflictos deben ser llevados a un tribunal. La misma Constitución de 1999, en el artículo 258, establece la creación de una Ley para la mediación, la conciliación y el arbitraje. Esa es la función del Centro de Resolución de Conflictos que recién se instaló en la Cámara de Comercio de Valencia.
Es el resultado de un convenio con el Centro de Docencia, Investigación y Asesorías (Cedias) que busca hacer frente a la crisis judicial venezolana.
El director del Cedias, Antonio Luis Girón, explicó que el proyecto viene de hace varios años atrás y nació en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad de Carabobo, donde se han ido formando profesionales para ser los mediadores de conflictos.
“Queremos poder enfrentar la crisis del Poder Judicial”, justificó Girón acompañado por el presidente de la Cámara de Comercio, Damiano Del Vescovo, y los directores de ese gremio José Puchi y Guillermo Manosalva, además del abogado Jesús Rosas Tirado, perteneciente al Centro de Resolución de Conflictos.
Del Vescovo comentó que este Centro será el primero de la región y que permitirá agilizar y reducir los costos a la hora de un conflicto, pues no será necesario acudir a los tribunales.
Entes de este tipo hay tres más en el país: en Caracas, que funciona de la mano de la Cámara de Comercio, en Barquisimeto, junto al Colegio de Abogados, y más enfocado en casos sociales y relacionados con niños; y en Maracaibo.
El Centro de Resolución de Conflictos de Valencia arranca con un enfoque comercial. Girón señaló que son frecuentes los conflictos con aseguradoras y esperan poder resolverlos. Más adelante, el plan es ampliar el Centro para todos los casos que surjan.
Una alternativa
Girón asegura que ejercer el derecho en el país es difícil. El retraso en los procesos hace que los juicios sean largos, costos y una prueba de paciencia para las partes en conflictos. Por eso, plantea seguir una tendencia que vislumbra la Constitución. En materia laboral, la mediación es obligatoria.
Cuando fue promulgada la Carta Magna, la justicia de paz estaba de moda, e incluso había programas de televisión que mostraban ejemplos claros de cómo funcionaría. Pero, el proyecto no caló en Venezuela y se desinfló. Ahora, con la promulgación de la Ley de Paz Comunal, a principio de mayo, se rescata esa figura.
Girón explica que el Centro de Resolución de Conflictos funciona bajo el sistema de justicia de paz. Las partes involucradas se ponen de acuerdo para ser asistidos por expertos y firman un contrato en el que se comprometen a respetar la decisión.
“Necesitamos convivir”, dice Girón, con la justificación de que ante un sistema judicial en crisis que no resuelve a tiempo los problemas más comunes de los venezolanos.
La mediación se logra si no hay interferencia de un tercero, pues en este caso sería una conciliación. De no limar asperezas en ninguna de las dos instancias, se llega al arbitraje, donde los involucrados son escuchados y se produce una decisión inapelable.
De otro modo, y a manera de prevención, a la hora de firmar un contrato con algún cliente, proveedor o trabajador, puede dejarse establecido en una de las cláusulas que ante cualquier inconveniente se acuda al Centro de Resolución de Conflictos.
También la tendencia mundial a buscar soluciones a los problemas fuera de los tribunales es seguida por esta iniciativa. Todo nace de la conflictología, que proviene de Europa y los países del cono sur americano.
En Valencia hay siete personas fijas que se dedicarán a la solución de conflictos. Ellos han sido capacitados y han sido formados, incluso, fuera del país. En Venezuela no hay estudios de postrado sobre la materia. Entre ellos: Argenis Urdaneta, Ricardo Girón, Miguel Angel Martínez y Jesús Rosas Tirado. También hay un grupo de colaboradores.
El Centro de Resolución de Conflictos funcionará en la sede de la Cámara de Comercio de Valencia, en la avenida Bolívar, en la planta baja. Para mayor información: 0241 8575115.
Talleres para los nuevos jueces
Antonio Girón y la directora de la Cámara de Comercio de Valencia, María Torres, destacaron una serie de talleres que buscan preparar a las personas que se enfocarán en atender los conflictos. “Para ser mediador, no es necesario ser abogado”, aclaró Girón.
Los talleres previstos son los siguientes:
-Tu empresa ante la crisis del Poder Judicial.
- El lenguaje corporal de la persuasión.
- Coaching empresarial.
- Perfil humano del mediador.
- Arbitraje alternativo (enfocado en casos con aseguradoras).
- El lenguaje corporal de la persuasión.
- Coaching empresarial.
- Perfil humano del mediador.
- Arbitraje alternativo (enfocado en casos con aseguradoras).