miércoles, 27 de marzo de 2013

Estados Unidos en quiebra arremete contra los pobres y cierra escuelas públicas


LOS SECTORES HUMILDES PAGAN LAS ESTAFAS NEOLIBERALES
LOS SECTORES HUMILDES PAGAN LAS ESTAFAS NEOLIBERALES






Las autoridades educativas de Chicago anunciaron el cierre

 de cerca de 60 escuelas públicas en la ciudad, con el 

argumento de mejorar la calidad educativa y hacer frente al 

un supuesto déficit que registran las cuentas del sistema 

educativo del distrito. La directora ejecutiva de las Escuelas 

Públicas de Chicago, Barbara Byrd-Bennett, aseguró en 

una carta en la que anuncia la decisión que “durante 

demasiado tiempo a los niños de algunas partes de la ciudad 

se les han negado los recursos necesarios para tener éxito, 

porque están en escuelas infrautilizadas y con escasos 

recursos“.

Por su parte, el alcalde de la ciudad, Rahm Emanuel, 

señaló: “La decisión fue retrasada durante una década y 

ahora son nuestros niños y nuestra ciudad las que han tenido 

que pagar el precio de la ineficacia”.

Asociaciones de padres se han opuesto a la medida porque, 

afirman, provocará que los niños tengan que desplazarse a 

escuelas fuera de sus vecindarios, y se incremente su 

exposición a la violencia existente en la ciudad.

UN TERRORISMO DE ESTADO QUE SE CENTRA EN LA SUPRESIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS BÁSICOS
UN TERRORISMO DE ESTADO QUE SE CENTRA EN LA SUPRESIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS BÁSICOS

La lucha por salvar estas 

escuelas se intensificó la 

semana previa a la votación, 

cuando padres y madres y 

otros en la comunidad escolar de Piccolo  - situada en un 

barrio pobre al oeste de la ciudad, con más de 60 por ciento 

de estudiantes afroamericanos y 35% latinos -ocuparon la 

escuela y luego unas 500 personas marcharon a la casa del 

alcalde Rahm Emanuel.

La ocupación de Piccolo comenzó con una enérgica 

conferencia de prensa fuera de la escuela. El Sindicato de 

Maestros de Chicago (CTU, por sus siglas en inglés), en 

medio de difíciles negociaciones contractuales con las 

Escuelas Públicas de Chicago, rápidamente emitió un 

comunicado en apoyo a la acción comunitaria en Piccolo.

Con un trasfondo de carpas y pancartas caseras, los 

estudiantes hicieron conmovedores discursos exponiendo 

por qué se oponen al plan de la Junta Escolar de “voltear” 

su escuela, y los padres anunciaron sus planes de 

pernoctar en la escuela. La unidad de los padres 

afroamericanos y latinos no pasó desapercibida.

Muchos oradores expresaron su frustración por haber sido 

ignorados por la Junta Escolar, nombrada exclusivamente 

por el alcalde Rahm Emanuel.

Latoya Wall, una ex alumna de Piccolo y madre de dos 

estudiantes en la escuela, afirmaba: “Este es nuestro barrio 

y nuestra comunidad. Nosotros vivimos aquí, sufrimos, 

recorremos estas calles todos los días. He estado viviendo 

aquí desde el 1992 y no podemos consentir esta agresión a 

nuestros derechos”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario